Me encanta visualizar este video, incluso le quito el sonido para recrearme y concentrarme en los paisanos y paisanas que, bailan como los malditos y malditas de aquella película, baile previo al tiro soga en septiembre de 1990.
Veinticuatro años después rejuvenecemos, reflexionamos sobre lo que hemos conseguido o no hasta llegar aquí, al día de hoy, y si eso está en consonancia con nuestras expectativas y sueños de entonces, ya que tal vez, recordar sea como mirarse en un espejo cóncavo, y nosotros seamos la imagen, el esperpento que nos devuelve el pasado.
Lo que si emociona es ver a los que ya no están, reconocerlos y saber sus nombres.
Os invito a darle al pause cada dos por tres, a ver a cuantos recordáis, a ver si reconocéis a vuestras madres padres, abuelos o abuelas entre los danzantes, a los amigos, amigas o a vosotros mismos, bailad con la memoria y el pasado y olvidaros de los espejos.