sábado, 20 de octubre de 2012

LA VEGA CUATRO ESTACIONES

Este verano y con motivo de las fiestas que organiza la Asociación Cultural Fuente Alberche, montamos una exposición titulada La vega cuatro estaciones. En ella, se hacía un recorrido por los oficios y tareas que se desempeñan (desempeñaban más bien, que muchas se han perdido), en función de la estación del año.

He de confesar que no tenía mucha fé en que saliera muy brillante la muestra, al final la gente que colabora, te contagia el entusiasmo, y cuando recogemos las cosas, sentímos que ha merecido la pena el esfuerzo, y la dedicación, aunque siempre haya alguien que le ponga pegas al asunto.

Este fue el borrador que escribí para ambientarnos y orientarnos para saber, que cosas, materiales, utensilios, y fotografías podíamos buscar y recopilar entre todos. No lo hago público hasta hoy.

 LA VEGA CUATRO ESTACIONES

Esto no tiene nada que ver con Vivaldi, ni con una modalidad de pizza, ni tampoco con red alguna de metro o ferrocarril, sin embargo La Vega (como todos), vive cuatro estaciones, pasa por cuatro estaciones, y en cada una de ellas, la vida, la actividad, se acompasa y ajusta el paso a esas cuatro estaciones que nos caen del cielo.

Muchos tal vez sólo conozcáis el pueblo en el tiempo del verano, pero son muchos los que lo han conocido, lo conocen, lo viven de modo intemporal (a todo tiempo).

Y siendo lo mismo cada día...!, ¡como cambia el paisaje!, ¡y como cambia el ambiente!, ¡la luz, los ruidos, los silencios...!.

Y sobre todo: ¡como cambian los oficios a desempeñar!, y de eso vamos a tratar aquí.

Hay que tener muy presente que hace relativamente poco tiempo, que ha llegado la mecanización al campo, y que antes, en tiempos de nuestros padres y sobre todo de nuestros abuelos, todos los trabajos que se relacionan a continuación se efectuaban manualmente, y ayudados por bestias de carga (burros, yeguas, caballos o vacas). Todo lo anterior es para que nos demos cuenta del esfuerzo que debían realizar para sacar adelante las tareas.

También hay que saber que las tareas se centran y giran principalmente alrededor de cuatro productos que han sido (y algunos lo son todavía) fundamentales en la actividad económica del pueblo, que son: el heno, el centeno, las patatas y el ganado.

Si leéis con atención, veréis que hablo de los oficios en tiempo pasado, y es que exceptuando el asunto de heno, (y lo de los huertos y matanza, por afición), todos los demás oficios están prácticamente extintos a día de hoy.

LA VEGA: OFICIOS DE PRIMAVERA
Después del sueño blanco y letargo, el pueblo se frota los ojos, se estira y sale de su madriguera como niño asombrado y recién nacido.
Y está todo por hacer...

• Hay que hacer las regaderas madres (Valhondillo, Pinaredondo, Cañilesia, son algunas de ellas).

• Hay que preparar los huertos y sembrarlos, los alzaban y luego los binaban, también se estercolaban.

• Hay que mondar los “praos”, que consiste en romper las moñigas secas del ganado, y esparcirlas, o para que salga más hierba.

• Hay que limpiar las casillas, y recoger de estiércol del ganado que quedó estabulado en invierno.

• Arreglar las paredes de los prados y “cerrás”, limpiar las callejas, y caminos.

• Había que ir de boyero o de chotero.

LA VEGA: OFICIOS DE VERANO
A día de hoy y en los tiempos que corren, los que trabajan y desempeñan algún oficio en el pueblo son cuatro, que el resto (hay que reconocerlo), vamos de vacaciones.
Y es en esta estación cuando se desempeñaban los trabajos más duros de todos.

• Por San Juan llegaban las vacas de Extremadura, y también las ovejas, que trashumantes venían de pasar el invierno en tierra cálida, en Extremadura. El pueblo suena a campanillos y las familias se reencuentran.

• Por julio se recogía el heno. Hubo un tiempo en que venían de otros pueblo a segar la hierba al pueblo, sobre todo gente de Navalosa y a esta gente que venía a realizar este oficio se les llamaba “coritos”. Los prados, se segaban, se rodeaban, se arriciabam, se acordonaban, se arriolaban, y se recogían. Antes, el heno se recogía suelto, se cargaban los carros (se acarreaba), y se guardaba en las casillas, o se hacían ameales, ahora todo está mecanizado y se recoge en paquetes cuadrados que se llaman alpacas, con ellas, a modo de pirámide o torre, se levantan gigantescas niharas, que cubren con lonas para evitar que se mojen con la lluvia, y se pudra el heno, la hierba seca.

• Por Agosto se recogía, y trillaba el centeno. En este trabajo participaban grandes y chicos de la familia. También venían a trabajar gente de las Hurdes (estos sobre todo a segar). Se segaba a hoz, se preparaban haces que atados, se llevaban a la era donde se tendían haciendo una parva, y se trillaba usando yuntas de vacas o cobres de yeguas. Después se amontonaba, se barría, y limpiaba la era, y se recogía el grano. El grano se utilizaba para hacer harina, para sustento del ganado, y también para hacer el pan negro. Antes en casi todas las casas, había panero o troje donde se almacenaba el grano, y también horno de masar, ¿y ahora?. También se recogía la paja, y a veces con esta, hacían preciosos gorros, y para los niños silbatos o flautines, y una especie de farolitos.

• No se descuidaban en verano los huertos, (entonces no había ni una sola tierra perdida), había que quitarles las malas hierbas (los cenizos a las patatas), ariscarlos, y también había que ir a regar, y eso era cuando tocaba, pues existía la figura del aguador, que era él que iba dando turno a los regantes (la papeleta), y eso podía ser a cualquier hora del día o de la noche. (regantes papeletas de riego aguadores).

• Como no había alambres, también había que ir de boyero cuando te tocara. Las vacas salían por la mañana, y luego otra vez por la tarde, antes de ponerse el sol volvían caminando al pueblo, y los dueños acudían a recoger las suyas, y si no cada una sabía donde tenía que ir.

• El fin del verano, y de las tareas, concluía con la fiesta de septiembre.

LA VEGA: OFICIOS DE OTOÑO
Los días se acortan, la luz se adelgaza y el frío se va haciendo presente, es hora de recoger los frutos, y prepararse para el invierno.

• Se arrancaban las patatas, se cogían por carros, había jornadas enteras dedicadas a este oficio, las familias comían en el mismo huerto, se preparaban un pucherete de legumbres o de las mismas patatas a la lumbre baja.

• Se recogían los pipos.

• Se cogían las manzanas.


• Se araban los huertos, y se estercolaban.

• Se sembraba el centeno.


• Se iba a por leña (se rozaba, escobizaba, y se amontonaba la leña en “jacinas” o “hacinas”).

LA VEGA: OFICIOS DE INVIERNO
Los dedos helados de invierno dejan su caricia de nieve en el pueblo, anochece en seguida, todo está dormido (que no muerto), y las tareas entran también en cierto letargo.

Poco se puede hacer en los campos nevados y helados.

El ganado está recogido en las casillas, o en tierra cálida (Extremadura), a donde los hombres de las casas han ido a su cuidado.

• Se hacía la matanza.

• Se atendía al ganado que quedaba en casa.

• Se Sacaba el estiércol de las casillas, y le amontonaban en muladares, para luego estercolar las tierras y huertos.

• Se celebraba la nochebuena, y se salía por las calles a cantar y pedir el aguinaldo.

***********************************************
Este fue el guión de la exposición, fuera quedó una sección de oficios perdidos y de carácter más domésticos, que quien sabe, si nos servirán para muestras venideras.

Ahora inserto, una presentación de video que proyectamos, y que hice deprisa y corriendo y sin conocimientos de técnica informática alguna, (es la primera de mi vida), algunos días antes, y con el material fotográfico que tenía a mano.