Un anuncio en el boletín de la diputación el pasado 11 de enero de 2022 me puso en alerta, y en seguida la compartí con los habituales de la "compartición".
Inserto aquí el PDF con el estudio, y las razones que concluyen en el resultado:
Como era de esperar en el diseño se hace alusión a San Martín (que partió con su espada su capa para compartirla con un pobre), y al río Alberche, y aunque curiosamente no fue hasta el 2 de julio de 1916 que el Alberche se incorporará a la toponimia del lugar, según se explica en la entrada de este blog: "El día en que al pueblo le cambiaron el nombre" pinchad aquí, es evidente que el Alberche es sin duda nuestro elemento más diferenciador y está ahí desde antes de la fundación del pueblo, y no podía faltar en el escudo y bandera.
Supongo que la heráldica, la historia, no da mucho margen a la imaginación, y para estas cosas se ha de ser rigurosos, porque a lo mejor cualquiera de nosotros hubiéramos propuesto incorporar algún otro elemento sin tener un respaldo histórico o fundamento, pero entonces no estaríamos hablando de un escudo sino de un logo.
A los/as que dicen que la tela amarilla parece una bayeta, que se lean los cuarenta folios.
Ya si podemos afirmar que somos un pueblo de bandera
